Así empezamos

 
 

Es el primer recuerdo que guardo de nosotras, así empezamos a crecer, es más, creo que de ese modo inició la vida: una recámara de tamaño medio, dos camas individuales con cabeceras idénticas, sobre cada una un cuadro con angelitos y arpas, un buró al centro con tres cajones, uno para tus cosas, otro para las mías, y el tercero para papeles, lápices, estampas, cartas, canicas y crayolas. Discutíamos por el orden y la luz, por el ruido y los novios, hablábamos de travesuras y sueños. Hoy, tantos años después, estamos casi igual, compartiendo una recámara que se parece a la de entonces, dos camas individuales, un buró. Conversamos sobre aquellos días, la imagen de nuestros padres, los hijos que crecieron, la vida que pasó. Así empezamos a vivir y así, supongo, empezamos a morir.

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