Té madrugada 65
A veces, mi mamá llama a las 6:30 de la mañana. Tiene algo que consultarme, una duda que no puede esperar. Piensa que si marca a esas horas no sólo no me despierta sino que además no interrumpe las múltiples actividades que hago durante el día. Así que pregunta con benevolencia: ¿Me puedes explicar realmente lo que sucedió en la Revolución Francesa? Me da risa en lo que invierte las horas de la noche, más aún que suponga que yo sé la respuesta. La madrugada, de algún modo, a todos inquiet